Carril para tranvías: Carril embebido de garganta y compacto
La existencia de los tranvías se remonta al siglo XIX, cuando se construyeron los primeros en las Ciudades de Nueva York y París. El carril de garganta embebido fue inventado en 1852 por Alphonse Loubat, como un carril especialmente diseñado para tranvías. La idea consistía en permitir la integración del resto de usuarios de la vía pública. En la actualidad, el carril de garganta se utiliza en las líneas de tranvía de ciudades de todo el mundo, ayudando a unir a las comunidades en un entorno eficiente y ecológico.
Tomemos por ejemplo a EE.UU., donde los tranvías se han convertido en una de las formas más populares para revitalizar los centros urbanos. Más asequible que el metro, la construcción de líneas de tranvía transmite el importante mensaje de que el desarrollo urbano es considerado una prioridad. El uso de carril de garganta embebido actúa además como un elemento de presencia permanente en la ciudad. Como dijo Len Brandrup, Director de Transportes, en Wisconsin: "Los tranvías tienen su sex-appeal. Conectan con la gente... Sus promotores no financian autobuses". Wall Street Journal informó además que el Distrito Pearl de Portland (una zona industrial en decadencia) generó más de100 proyectos nuevos por valor de 2.300 M$ después de una inversión de 57 M$ en proyectos de tranvía ligero.
ArcelorMittal es una empresa líder en fabricación de carril que viene atendiendo las necesidades de carril de garganta embebido en ciudades de todo el mundo. A pesar de que la tecnología ha recorrido un largo camino desde el siglo XIX, el carril convencional de garganta ha permanecido prácticamente sin cambios durante más de cien años con poca o ninguna variación en su forma o aspecto.
ArcelorMittal, en su compromiso por satisfacer la creciente demanda del mercado mediante soluciones innovadoras y sostenibles, ha desarrollado un nuevo perfil de garganta denominado “carril compacto”. Parecido a un carril de garganta convencional, pero con una forma de sección compacta, permite una menor altura, solo 72 mm en lugar de los 150 - 180 mm del carril de garganta convencional.
Las ventajas son evidentes: Menos material de relleno y menos costes de construcción, así como reducción de los tiempos de parada por mantenimiento. Además, su diseño permite reducir ruidos y vibraciones (3-10 dB menos) aumentando el confort del viaje y la vida útil. En términos de rendimiento, el carril compacto es capaz de soportar cargas pesadas superiores a 40 toneladas por eje y capacidades de pre-flexión tan reducidas como curvas de 20 metros de radio, todo gracias a su diseño compacto.
En ArcelorMittal nos satisface atender sus particulares necesidades de carril, no dude en contactar con nosotros.